miércoles, 29 de mayo de 2013

Publicación de las Actas: Lorca, viajero por América, en el CVC

Logo Encuentro Lorca: Viajero por América, organizado por Mirada Malva, Consuelo Triviño y Reina Roffé
Con motivo del 75 aniversario de la muerte de García Lora, Mirada Malva celebró un encuentro en Casa de América de Madrid a finales del año 2011. El Centro Virtual Cervantes ha publicado las actas de este evento,  con diversos trabajos y testimonios gráficos de sus sucesivos periplos atlánticos, en los que el autor visitó Nueva York, La Habana, y Buenos Aires y Montevideo. En ellos dialogó con los intelectuales y artistas más representativos de aquellos años (1929-1934) y ejerció sus conocidas habilidades como conferenciante, poeta y dramaturgo; como músico y dibujante.

Se pueden consultar las actas en http://cvc.cervantes.es/literatura/lorca_america/default.htm

lunes, 27 de mayo de 2013

Reseña a La vida breve de Isaac Goldemberg

La vida breve. Antología personal. I. Goldemberg
Por Alberto Julián Pérez 
Texas Tech University 

Reseña de Isaac Goldemberg, La vida breve. Antología personal (2001- 2012). Ediciones UPAGU: Cajamarca, 2012.  

Este libro del escritor Isaac Goldemberg (Chepén, Perú, 1945) reúne más de diez años de labor poética. El autor, reconocido sobre todo por su novelística, particularmente La vida a plazos de don Jacobo Lerner, 1978, ha publicado numerosos poemarios a partir de 1970. En esta antología selecciona poemas de sus libros Peruvian blues, 2001; Los cementerios reales, 2004; Libro de las transformaciones, 2007; Cuerpo de amor, 2009 y poemas inéditos que incorpora bajo el título Variaciones Goldemberg en 2012.  

La antología está precedida de una excelente introducción y estudio crítico de Eduardo González Viaña, donde éste destaca la experiencia bicultural del poeta. Goldemberg mira simultáneamente al Perú y a New York e, hijo de un matrimonio mixto, de padre judío y madre católica, reflexiona sobre su judaísmo. En el primer poemario de la antología, Peruvian blues, toma como modelo poético el “blues”, composición musical melancólica que expresa en sus letras las experiencias sentimentales de los negros norteamericanos de manera coloquial y humorística. Notamos en poemas que reflexionan con sarcasmo sobre la vida, como “Huayno zapateado de Chepén a Santiago de Chuco”, “Los judíos en el infierno” y “Memorias de mercachifle”, un deseo explícito de integrar cultura popular y alta cultura.  

Goldemberg recrea el mundo de su infancia en el Perú, su relación con sus padres y la vida comunal de Chepén. Es una experiencia que lo marcó. Podemos pensar que allí aprendió a entender la vida desde una perspectiva espiritual y religiosa que caracteriza su poesía. El poema “Crónicas” sintetiza este punto de vista; dice el poeta: “…hoy en día la palabra ha dejado de ser el arma del profeta/ y la razón de esta época distanciada como nunca/ del misterio que nos teje el universo/ sólo se refleja en la mudez de nuestros muertos”.  

En su próximo poemario antologado, Los cementerios reales, del 2004, juega con el título del famoso libro de Garcilaso, Comentarios reales. Hace de “comentarios”, “cementerios”. Es un libro en que mezcla el humor popular con la burla, y dirige el sarcasmo hacia sí mismo y hacia su dios, como en el “Soneto inexacto del judío peruano y viceversa” y “Mail de Dios a los pueblos elegidos”. Ese tono burlón es uno de los aportes más interesantes de Goldemberg en el uso de la lengua: es el humor peruano criollo, que tan bien supo representar Palma en sus inigualables Tradiciones. Si bien el poeta ha residido en New York la mayor parte de su vida, notamos en su lengua poca influencia del inglés. Su castellano denota más bien el uso de la lengua de New York, donde habita una colectividad hispana multiétnica proveniente de diferentes países hispanohablantes de más de dos millones de personas. 

El español de New York, literariamente hablando, es un español léxicamente empobrecido, ya que la educación pública es en inglés y el español es estudiado como segunda lengua o lengua extranjera, pero parece conceptualmente fortalecido por la relación entre variantes nacionales del uso de la lengua y su contacto con el inglés. El hablante multilingüe tiene conciencia de la sintaxis de cada lengua y su papel en la escritura. Sabe recurrir con soltura al uso pragmático y “hacer” cosas con la lengua. Esto lo observamos en poemas como “Resucitar un muerto” y “Testamento”, donde el poeta realmente siente que la lengua tiene una utilidad relacionada con sus necesidades y sus experiencias.  

           El hablante de las minorías hispanas de New York, al que Isaac representa, está siempre deseoso de salir de su condición subalterna, es consciente de la mirada desvalorizadora del otro, del angloparlante que se siente representante legítimo de su país. Hay en la poesía de Goldemberg una búsqueda de legitimidad, de filiación, de aceptación. Sus dos primeras identidades: la judía y la peruana, confluyen en otra identidad nueva: la de hablante minoritario hispano en un país angloparlante. New York es la puerta cosmopolita a Estados Unidos y en ella pueden encontrar espacio de convivencia los sujetos de múltiples países. New York se constituye como una cultura diaspórica. Isaac se identifica con ese sujeto diaspórico neoyorquino, que sólo puede vivir en una ciudad abierta y plural. Recrea los recuerdos de su patria en un juego literario lleno de nostalgia que contribuye a fortalecer su nueva identidad.  

Esa conformación de un lenguaje nuevo, conceptual y sintético, “descolorido”, lo vemos en poesías como “Hombre de paso”, cuando dice “Todo es por accidente:/ se le pierde el miedo a la muerte/ porque hay días del hombre/ que se le escapan”. El poeta busca captar, explicar conceptualmente lo que siente, la idea de lo que es ser “hombre de paso”. Tiene necesidad de ser claro para todos los hablantes y hasta pedagógico. Las condiciones subjetivas del hablante minoritario cambian radicalmente en relación con las del hablante que siente que representa la lengua nacional legítima de un país. Es una situación enunciativa casi “secreta” y culposa. El sujeto de las minorías tiene un miedo inconsciente a la marginación y al rechazo, que se hace evidente en la escritura.  

En el próximo poemario de la antología, Libro de las transformaciones, de 2007, que alude al I Ching chino, el oráculo que orienta al ser humano sobre cómo conducirse en la vida, Goldemberg lleva a cabo una importante meditación histórico-religiosa sobre sus dos raíces: judaísmo y cristianismo. La convivencia de ambas se materializa para el sujeto en una lucha, una agonía, que vemos en poemas como “Oración fúnebre”, donde la máscara de una momia peruana del museo de New York lo lleva a dialogar imaginariamente con sus familiares del Perú durante su niñez, y en “Umbilicus mundi”, donde medita sobre las dos ciudades representativas y simbólicas de sus dos religiones y culturas: Jerusalén y Cusco.  

El último libro antologado es Cuerpo de amor, de 2009. Aquí el poeta cambia su preocupación existencial para cantarle al amor. Aparece la imagen del doble, y de la ambigüedad amorosa en los amantes. En “Dobles” dice: “Del lado del doble de la mujer/ se ha sentado el hombre a ver su doble”. Ensaya composiciones populares, como la décima, para hablar al ser amado de manera más coloquial e íntima, más persuasiva, y otras inspiradas en danzas criollas peruanas, como la marinera y el vals, el tondero y el fandango. Aquí usa un lenguaje popular apicarado y vivaz, adecuado al coloquio de la danza; dice en “Fandando criollo”: “Tú eres sagrada y profana/ tú eres cau-cau y turrón/ anticucho de corazón/ frejol a la chepenana/ cajón de buena jarana.” 

La antología termina con su producción más reciente inédita, que reúne bajo el título Variaciones Goldemberg, de 2012. En esta última parte, cuya organización quizá no sea definitiva, vuelve a aparecer la preocupación histórica y antropológica que encontrábamos en Libro de las transformaciones. Es un tipo de poema, como “Tierra prometida”, que tiende a una interpretación épica y ética del mundo, desde una posición contemporánea responsable ante las posibles catástrofes que pueden aguardar al ser humano si no controla su ambición y cruel lucha por el poder. Dice Isaac: “En el deseo de transmutar el futuro,/ en los planetas vacíos,/ en las presencias amargas,/ una larga cadena nos dejó caer./ Faltó la paz en cuevas y cabañas./ Abundó la guerra.” 

Isaac Goldemberg
Toda esta antología refleja una actividad y meditación constante del poeta maduro, que sigue buscando con su poesía nuevos caminos. Isaac Goldemberg se plantea su poesía como espacio de expresión, pero también de cambio, de transformaciones. Ve la poesía como un espejo de la conciencia en que el poeta debe mirarse y ver al mundo reflejado en él. Notamos en su poesía un progreso constante, es un poeta que no se repite a sí mismo y busca nuevos rumbos para su obra. Testimonia a un nuevo tipo de escritor aún pobremente estudiado y comprendido: el escritor de las minorías hispanas norteamericanas que se expresa en su lengua materna. Un escritor diaspórico que ve el mundo dividido, donde su pasado se separa de su experiencia contemporánea, y que, en el caso de Isaac, suma a esa separación de nación y lengua, su situación religiosa conflictiva, como judío nacido en un país católico y en un matrimonio mixto. Su literatura se caracteriza por expresar un sentimiento doloroso de pérdida y la necesidad de reparación, que obliga al sujeto a bucear en su pasado y estar en constante búsqueda de su identidad. 






domingo, 26 de mayo de 2013

Novelas de Isaac Goldemberg en formato digital

NOTA DE PRENSA: NOVELAS DE ISAAC GOLDEMBERG EN FORMATO DIGITAL

Dos novelas del peruano Isaac Goldemberg han sido publicadas en formato digital por RED [publica]>e.book, editorial con sede en San Juan, Puerto Rico.

Las novelas de Goldemberg que entraron a formar parte del catálogo del sello son La vida a plazos de don Jacobo Lerner y El nombre del padre, la cual es una recreación ampliada de la primera, con nuevos personajes, nuevas escenas y un desenlace diferente.

Ambas novelas narran la historia de Jacobo Lerner y León Mitrani, amigos de infancia que llegan al Perú provenientes de una aldea rusa. Encuentran un país caótico donde los judíos son acusados tanto de ser capitalistas como comunistas, y por consiguiente de ser responsables de la debacle económica. Con el tiempo, van armando y desarmando sus vidas en ese lugar, y ante el horror de Jacobo, León va cayendo en la locura. Sus arengas frente a la iglesia del pueblo le hacen ganarse las burlas y el odio de los habitantes. En ese marco se desarrolla un drama que es al mismo tiempo una apasionante historia de amor y una recreación del mito del Judío Errante.

La vida a plazos de Jacobo Lerner
La vida a plazos de don Jacobo Lerner fue seleccionada por el Yiddish Book Center de los Estados Unidos como una de las 100 obras más importantes de la literatura judía mundial de los últimos 150 años.

Según palabras de Mario Vargas Llosa, “La vida a plazos de don Jacobo Lerner coloca a Isaac Goldemberg como uno de los más altos exponentes de la nueva narrativa latinoamericana. El humor, la fina percepción de lo cotidiano, la fluidez narrativa y la profundidad de los personajes hacen de esta novela una experiencia francamente recomendable”.          
         
          El Premio Cervantes José Emilio Pacheco afirma, por su parte, que esta novela de Isaac Goldemberg “se mantiene en pie como una de las grandes obras de la literatura peruana, hispanoamericana y de lengua española. No creo exagerar al decir que La vida a plazos de don Jacobo Lerner es ya uno de nuestros clásicos”.  

El nombre del padre
          Sobre el El nombre del padre, el crítico Ricardo González Vigil escribió en El Comercio de Lima, que esta novela “marca la madurez artística de Isaac Goldemberg: profundiza en la psicología de los personajes, desarrolla episodios apenas mencionados en La vida a plazos de don Jacobo Lerner y, sobre todo, sin perder el tono irónico, asume con mayor complejidad la herencia cultural judía y sus nexos conflictivos con el antisemitismo”.

 Ambas novelas pueden adquirirse ingresando a http://latienda.republicainc.com o escribiendo a info@redpublicainc.com

         
 Isaac Goldemberg nació en Chepén, Perú, en 1945 y reside en Nueva York desde 1964. Actualmente, es Profesor Distinguido de Hostos Community College de The City University of New York, donde dirige el Instituto de Escritores Latinoamericanos y la revista internacional de cultura Hostos Review.

sábado, 25 de mayo de 2013

La mirada desobediente, nuevo libro de poesía de Adriana Hoyos


LA AUTORA
Foto by Mikhaela Mikhaelova
Adriana Hoyos (Bogotá, 1966) ha vivido a medio camino entre Latinoamérica y Europa. Nacida en una familia de músicos, desde pequeña se instruye en el arte del violín; luego viaja a Barcelona, donde aprende de soledades y desarraigos. En Sabadell, salta de unas primeras lecturas reveladoras (Lorca, Neruda), en su casa, a otras tan vanguardistas como precoces (Gimferrer, Mallarmé, Eliot), en la escuela. Ya mayor de edad, vuelve a Bogotá y se hospeda durante varios meses en un pequeño hotel del centro histórico y bohemio de la ciudad, mientras hace parte de la Orquesta Sinfónica Juvenil y sobrevive impartiendo clases de violín. En busca de equilibrio, asiste a cursos de literatura en la Pontificia Universidad Javeriana, pero el caos capitalino y la nostalgia la reconducen a España. En Barcelona se desenvuelve como técnico ocular en la clínica de su tío, eminente oftalmólogo. Se obsesiona entonces con las miradas insondables, extraviadas, sutiles, cambia el foróptero por las cámaras y estudia cine. Realiza varios cortometrajes como directora hasta que junto a una mirada amorosa arriba a Madrid, donde se dedica a la gestión cultural. Funda la productora La Huella del Gato, orientada a la publicidad y al desarrollo de proyectos fílmicos, y crea el festival Visual Cine Novísimo, que tras sus doce ediciones se consolida como la plataforma de exhibición y promoción audiovisual más destacada en la Comunidad de Madrid. Entonces retoma su pasión por la escritura, y publica La torre sumergida (2009).

En su nuevo libro, Adriana Hoyos trata de acomodar su visión a una distancia, a un tamaño de las cosas. Cuando desviamos nuestros ojos por pudor, prudencia o educación, la mirada desobedece por instinto y se posa sin contemplaciones, directamente  sobre aquello que se intenta evitar.

martes, 21 de mayo de 2013

Estelle Martineau: Poesía bilingüe

Estelle Martineau

Estelle Martineau (Châteauroux, Francia, 1977). Luego de realizar estudios de literatura en la universidad de Nantes (licenciatura en Letras Modernas, opción Teatro) trabaja varios años como actriz de teatro independiente en compañías (compagnie du pont neuf, compagnie des contes à rebours,…) de Nantes y París  En 2007, después de su presentación del monólogo de “Blanche Aurore Céleste” de Noëlle Renaude en París  se va a vivir a Guadalajara, México, donde aprende el español y empieza una serie de traducciones a nivel docente (La danza en la educación de Manuel Arreola Rubio). En octubre del 2010 abre en esta ciudad un centro cultural educativo “Le Moulin des Arts”, que propone varias actividades culturales (música, danza, teatro, pintura, idiomas)  y donde enseña inglés y francés. Escribe desde los 15 años.  


  

Traducción al español de Estelle Martineau
  

 LANGAGES

Les sons se mélangent dans l’air chaud
Mais gardent leurs sens
Et dans cette étrange danse 
Se distinguent les échos
Qui en volutes transcendantes
M’enveloppent d’une fine couverture
Fragile, légère et chancelante
Pleine de douces ouvertures :
Aérations rafraîchissantes et pures
Qui ravissent mon âme
Qui tombent les murs
Et me soufflent le charme
D’un monde nouveau
Couleur Sombrero



LENGUAJES

Los lenguajes se mezclan en el aire caliente
Pero conservan su sentido
Y en este extraño baile
Se distinguen los ecos
Quien en espirales trascendentes
Me envuelven en una fina cobija
Frágil, ligera y tambaleante
Llena de suaves aperturas:
Ventanillas refrescantes y puras
Que alegran mi alma
Que derrumban las paredes
Y me soplan el encanto
De un nuevo mundo
Color Sombrero


***


ENFANCE
Aux abords des odes joyeuses
S’échappant des pins et sous bois
Courraient en symphonie heureuse
Dans mon cœur enfantin :
C’était l’annonce de promesses
De trésors chamarrés d’espièglerie
Où ma fougue pourrait s’élever en liesse
Dans les hauteurs verdoyantes où l’oiseau rit
Puis la grosse clef tout en craquant
Tournait dans la vieille serrure
Usée par le temps ;
Le portail s’entrouvrait lentement,
Sur le paradis de verdure
Sur les feuilles aux reflets d’argent
Sur les senteurs de l’été furibond
Sur la liberté sauvage
Des enfants pas sages
Enfin libres de faire des bonds




INFANCIA

Al llegar odas alegres
Escapándose de los pinos y malezas
Corrían en sinfonía feliz
En mi corazón infantil:
Era el anuncio de promesas
De tesoros ajigoleados de travesura
Donde mi brío podía elevarse jubiloso
En las alturas verdosas donde el pájaro se ríe
Luego la grande llave crujiendo
Giraba en la vieja cerradura
Gastada por el tiempo
La cerca se emparejaba lentamente
Sobre el paraíso de la naturaleza
Sobre las hojas de reflejos de plata
Sobre los aromas del verano apoplético
Sobre la libertad salvaje
De los niños inquietos
Al fin libres de andar brincando

***


CACHE-CACHE

Sous la lune voyeuse
Je me faufile en vermisseau
Sa clarté se reflète dans l’eau
La belle est pâle, vers-luisante
Puis elle se fait voyante
Et je me cache, fileuse
Parmi les feuillages épais
Parmi les herbes dansantes
Et les vapeurs odorantes
Mais les éclats de lait
En douce se glissent
Ne laissent aucun interstice
Me découvrant, souriante, nue
Révélée et émue


ESCONDITES

Debajo de la luna voyerista 
Me deslizo como lombriz
Su luz clara se refleja en el agua
La bella es pálida, cristal brillante
Luego se hace vidente
Y me escondo, fugaz
Entre los follajes abundantes
Entre las hierbas danzarinas
Y las fragancias en olas
Pero sus esquirlas de leche
Suavemente se deslizan
No dejan ningún escondite
Descubriéndome, sonriente, desnuda
Revelada y conmovida

***

IL PLEUT

Il pleut des gens sur le pavé mouillé
Leurs talons crépitent dans l’odeur pleine
De la journée achevée
Il pleut des gens sur le pavé mouillé 
Et ils se regardent, fatigués, sans haine
Formant une large flaque humaine
Il pleut des gens dans mes yeux étonnés
De leur regard délavé, usé, blême, 
Bulles translucides et irisées…
Il pleut des yeux comme des gouttes nacrées
Des reflets d’âmes sur le goudron blasé
Et cette masse de corps souveraine
S’étale et se disperse, arythmée.
Il pleut des ombres dans les galeries souterraines,
Et leur silence fait trop de bruit.


LLUEVE

Llueve gente en el pavimento mojado
Sus tacones chisporrotean en el olor lleno
De la jornada completada
Llueve gente en el pavimento mojado
Y se miran, cansados, sin odio
Formando un ancho charco humano
Llueve gente en mis ojos sorprendidos
De sus miradas lavadas, usadas, pálidas,
Burbujas traslucidas e irisadas…
Llueve ojos como gotas nacaradas
Reflejos de almas en el piso indiferente
Y esa masa de cuerpos soberana 
Se esparza y se dispersa, aritmada.
Llueve sombras en las galerías subterráneas,
Y su silencio hace demasiado ruido.

***

L’HEURE MAUVE

Sur la couche des cieux 
S’étale un rêve merveilleux
Blanc avec des oiseaux bleus
Où trottent parfois quelques yeux
Qui s’appesantissent. Une étoile
Verte, un sourire gris chat
Qui s’étire comme un châle 
Qui se déchire comme un voile
Et qui nous fait rire, en bas.
Parfois la lune charmeuse 
Chatouille d’un cil aveugle 
L’aube vermeille amoureuse
D’un rayon de soleil perdu.
Elle rougit un peu, mais l’aigle
Des cieux fait taire ces deux grues
Et arrache l’astre a son alcôve
A l’heure de l’Heure Mauve


LA HORA LILA

En la cama de los cielos
Se esparce un sueño maravilloso
Blanco con pájaros azules
Donde trotan a veces algunos ojos
Que se estancian. Una estrella
Verde, una sonrisa gris gato
Que se estira como un chal
Que se desgarra como un velo
Y que nos da risa, ahí abajo
A veces la luna encantadora
Cosquillea de una pestaña ciega
El alba escarlata enamorada
De un rayo de sol perdido.
Se sonroja un poco, pero el águila
De los cielos calla esas dos grúas
Y arranca el astro de su alcoba
A la hora de la Hora Lila

***

LA DISPUTE

Infinie grandeur…infinie petitesse
Infiniment humain
Erreur de l’hermétisme en liesse
Monologues vains
Plans superposables de dialogues incompris
Justesses de théorie
D’angles divergents, saillants 
Et pourtant Zidentiques,
Identiquement coupants
Dans l’assurance lubrique
De notre contentement
Incompréhension de l’infiniment humain
Incompréhension de l’humain… infiniment ?


LA DISPUTA

Infinita grandeza…infinita pequeñez
Infinitamente humano
Error del hermetismo jubiloso
Monólogos vanos
Planos apilables de diálogos incomprendidos
Justezas de teoría
De ángulos divergentes, turgentes
Aunque Zidenticos
Idénticamente cortantes
En la seguridad lubrica 
De nuestro contentamiento
Incomprensión del infinitamente humano
Incomprensión del humano… infinitamente?

***

GITAN

La sphère jaune court sur le toit
De tôle, au milieu des longs chats
Blonds que caressent les doigts
Sveltes du soleil qui se noie,
Et puis sur l’horizon
S’illumine le ciel ;
Doucement s’élève la chanson
Du musicien vermeil :
Il chante un air apaisant
Que les grillons connaissent
Un air que paissent
Les moutons blancs volants


GITANO

La esfera corre en el tejado
De lámina, entre los largos gatos
Rubios que acarician los dedos
Esbeltos del sol que se ahoga,
Y luego en el horizonte
Se ilumina el cielo
Despacito se levanta la canción
Del músico escarlata:
Canta una melodía calmante
Que los grillos conocen
Una melodía que pastan
Los borregos blancos volantes

***

OPÉRA D’OCTOBRE

Un ciel d’émail s’étire comme un pull sur le ballet débutant des feuilles rouges et
Or.
A terre des étoiles ternes et mortes brillent, immobiles à l’abri du vent.
Les tentacules végétales muent au gré des courants et forment une valse d’automne languissante comme 
un tango lent.
Et puis un concert rauque s’élève des gorges moites dans le silence parsemé.
L’automne est à nos pieds.
Bruissement d’eau.
Frottements d’air.
Vol décadent des
Papillons verts
Sans âme.
Le temps boîte. Il traîne son pied bot sur
Le goudron décharné.
De la voûte immaculée se détachent les cheveux roux de l’automne.
Chute vertigineuse. Ivresse du vide. Rires
Légers qui frissonnent dans les branches.
Le vent vainc.
Les sons montent.
Les cous toussent et poussent l’air virevoltant de l’opéra d’Octobre.


ÓPERA DE OCTUBRE

Un cielo de esmalte se estira como un suéter sobre el ballet principiante de las hojas rojas y
Doradas
En la tierra estrellas opacas y muertas brillan, inmóviles protegidas del viento.
Los tentáculos vegetales mudan siguiente los corrientes y forman un valse de otoño lánguido como
Un tango lento.
Luego un concierto ronco despega de las gargantas húmedas en el silencio salpicado.
El otoño está a nuestros pies.
Susurro de agua.
Fricción de aire.
Vuelo decadente de las
Mariposas verdes
Sin alma.
El tiempo cojea. Arrastra su pie zambo en 
La ruta deshuesada
De la bóveda inmaculada se desprende el cabello pelirrojo del otoño.
Caída vertiginosa. Embriaguez del vacío. Risas
Ligeras que tiemblan en las ramas
El viento vence.
Los sonidos suben.
Los cuellos tosan y pujan el aire girando de la ópera de octubre.


***


domingo, 12 de mayo de 2013

Recuerdos del futuro de Mario Meléndez

Ricardi del futuro. Mario Meléndez
Casa Editrice L'arcolaio
Forli, Italia, 2013


RICORDI DEL FUTURO / RECUERDOS DEL FUTURO 

Mario Meléndez



REVELACIONES
                                                                                                                                                     
Por Hernán Antonio Bermúdez 
Ensayista y crítico literario hondureño

“y las palabras gimieron, aullaron” (p. 16)


Decía David Foster Wallace (admirador de Borges y de Roberto Bolaño) en un artículo de 1994 que sólo los escritores de Europa oriental y de América Latina habían conseguido un buen maridaje entre, por un lado, los asuntos del fuero íntimo y del sentimiento humano y, por otro, el desapego paródico propio de la experiencia postmoderna.

Esa combinación sale justamente a relucir en el poemario Recuerdos del futuro (2013), edición bilingüe español-italiano, del chileno Mario Meléndez (1971), residente en Italia.

Resulta, en efecto, reconfortante encontrar, entre tanta poesía chata y previsible, a un poeta con audacia y humor negro, sabedor de que “el lenguaje se burla de nosotros” (p. 14), y que no teme ser tildado de fantasioso o extravagante.

Dotado de una conciencia magistral del oficio y de una aguda sensibilidad literaria, Meléndez, poeta errante, desplazado (de Chile pasó a México, y de México a Italia), no imposta la voz cuando afirma: “No estoy, no soy, no pertenezco/ vago de lado a lado, como un gran gusano negro” (p. 42).

Sus poemas fluyen con las virtudes artesanales de medida y acabado, y el poder lírico de sus palabras pareciera emerger de la superficie de la conversación por su naturalidad y soltura: “Vengan a ver mi poesía/ no está hecha de material ligero/ aguantará perfectamente el invierno/ y en verano refrescará/ las mentes y los cuerpos/ Hay poderosas vigas entre cada verso,/ hay listones apuntalando mis palabras/ y si la lluvia desea entrar/ pondré mis sueños en el techo/ y taparé las goteras/ con mi propio dolor (“Para mayor seguridad”).
Meléndez se vuelve amargamente lúcido a la hora de aludir a la muerte, que “tiene cuerda para rato” (p. 42), a la que encara en “Confesiones” y con la que torea en los magníficos versos de “La invitación”, donde narra con precisión sarcástica sus propios funerales.

De otra parte, lleva a cabo un ácido escrutinio de Chile, del sitio primigenio de sus tormentos, en los poemas épicos “Me sobra un muerto”, “Más allá de la guitarra”, “Sangre en el exilio” y “Mi pueblo”. Son un tanto altisonantes para mi gusto, pero en ellos sabe expresar la certidumbre de que el orden social es apenas una tenue ficción que encubre la áspera maleza de desolación y violencia que tan bien conocemos en América Latina.

Sin embargo, como –según se dice- vivimos en la esfera de nuestros deseos e imaginación tanto como en nuestra vida real, Meléndez cambia de registro para abrirle paso al humor y a la paradoja. ¿El saldo? Ahí está la deliciosa sátira de sus poemas felinos “El clan Sinatra” y “Mi gato quiere ser poeta”, hasta culminar con esa alocada recreación  de “Caperucita roja” en “La Otra”, donde no vacila en añadirle una capa insólita de juego y mordacidad –léase una “vuelta de tuerca”-  al clásico cuento infantil.

Y aparte le brinda al lector los poemas de voltaje erótico como “Llévame”, “Si fueras calva también te amaría”, “Será debajo de la cama” y “Un día volveré a tus ojos”. Aquí la maquinaria de su poesía se enardece y sus versos, aptos para “rendir cuentas” del fragor amoroso, se tensan habida cuenta de su propensión hacia las imágenes de linaje surrealista: “Si fueras calva también te amaría/ me volvería loco besando tu cabeza/ tu pequeña luna dorada/ Si fueras calva, oh si fueras calva/ te llevaría por el río de la memoria/ me sentaría junto al fuego de tus ojos callados/ derramaría un cisne en medio de tu frente” (p. 62).

Resta mencionar que el formidable poema “La playa de los pobres” se emparenta, por los particulares ritmos de su música, con el tono del poemario Los pobres del hondureño Roberto Sosa, que le hizo acreedor al Premio “Adonais” de España en 1968, marcado por un lacónico y sosegado patetismo.

Para finalizar, diría en términos reseñísticos que, parafraseando a Foster Wallace, Mario Meléndez logra en Recuerdos del futuro que la efusión emotiva y la excentricidad  irónica no sólo cohabiten sino que se refuercen la una a la otra.

                                    Roma, 15 de abril del 2013 


miércoles, 1 de mayo de 2013

100 Minificciones peruanas contra la violencia de género

Basta, 100 mujeres contra la violencia de género


100 Minificciones peruanas contra la violencia de género
Basta, 100 mujeres contra la violencia de género, prólogo de Christiane Félip Vidal, Lima, Estruendomudo, agosto, 2012, pp. 113.

Por Sylvia Miranda Lévano 

Basta…, es una antología cuyo objetivo es abrir puertas y ventanas, derribar tabiques, descorrer cortinas, merodear por los pasillos olvidados de las ciudades, viajar a los lugares abandonados de la mano de dios entre montañas y selvas, e introducirnos en el dolor diario, en la inhumanidad cotidiana, tan admitida como absoluta, que se comete contra las mujeres. Mujeres, víctimas por ser mujeres.
            Esta antología preparada por Christiane Félip Vidal y Cucha del Águila ha convocado a 100 mujeres peruanas, escritoras, educadoras, artistas, activistas, fotógrafas, víctimas de violencia de género, periodistas, y muchas otras que desempeñan distintas profesiones o actividades, a crear un microrrelato, de no más de 150 palabras, para describir, denunciar, expresar, ficcionalizar, la realidad de la violencia que padecen muchas mujeres en el Perú, como en tantas partes del mundo. Los relatos nos confirman lo que ya sabemos, que no importa la edad, la condición social, o la educación para ser una víctima, pero tiene la gran ventaja de mostrarnos, a través de la palabra, la experiencia individual, los detalles, el dolor, el abandono así como el valor de la que se enfrenta a la violencia machista, desde las formas más sutiles de poder e intimidación hasta las más brutales que llevan a muchas a la muerte.
            El libro busca a sus lectores no sólo para romper con el silencio ignominioso sino para darles respuestas, para poner luz en conductas consolidadas por la costumbre y revelar su aspecto destructor, para restablecer, mediante la ficción, la voz y la dignidad de las mujeres, de todas las mujeres, víctimas o no de esta violencia que nos afecta como género.
            Otro valor, muy destacable de esta obra, es el diálogo, la sincronía que se crea entre las propias mujeres que escriben a través del tema. Esto nos permite apreciar una riqueza cultural, una complejidad generacional, una diversidad de estilos, de enfoques, que pocas veces se aprecia con esa frescura, muy al margen de la cuestión estrictamente literaria. Este intercambio se manifiesta en la convivencia de textos muy diversos, en los coloquialismos urbanos de ficciones como “Las prefieren rubias” o “Síndrome de Estocolmo”, en rasgos que llevan la impronta bilingüe de un español enriquecido con el sustrato de la lengua y cosmovisión nomatsiguenga en los relatos “Saatanchira (curandera)” y “Cuida a tu esposa”, en el uso de los intertextos literarios de “¿Crónica anunciada?”, en la utilización de símbolos míticos de la literatura andina en relatos como “En el corral” y hasta en la recreación de modelos del habla colonial en “Confidencias en el callejón (Lima siglo XVII)”.
Como característica de la minificción, el humor negro encuentra un espacio relevante en muchos de estos relatos, así como el juego de ambigüedades, las estrategias de sorpresa y la ironía, tal es el caso de “La reu”, “El premio nunca llegó”, “Muestrario” o “Tarea final”, entre otros. El tono confesional, introspectivo se manifiesta también en estas creaciones, así como el alegato directo. No es una simple formalidad la pequeña autobiografía que acompaña cada minificción, en muchos casos completa el cuadro variopinto de esta antología, otorgándole un carácter más personal, una cercanía más palpable con el lector, afirmando un nosotras muy vivo frente a la soledad.
              Basta…, es una antología que pide que algo se transforme en cada lector, reclama, parafraseando el relato “Oración”, que baje de sus altares y se una a todas, que termine con el silencio, por los siglos de los siglos, amén.